Silvia Rizo y Alfredo Aguilar en Tardes de Concierto del INBA

Como parte del programa “Bellas Artes a todas partes” el Instituto fundado en 1946 otorgó a través de sus concertistas un extraordinario Concierto Maestro en Sala de Diálogos del Centro de Innovación y Educación, con el fin de complacer al público mochitense en el deleite sonoro con calidad interpretativa por parte de los artistas y el repertorio basado en obras de Enrique Granados y Joaquín Rodrigo.

Los aplausos fueron la bienvenida de los asistentes hacia los artistas, quienes iniciaron poco después el repertorio con Danza española No. 5 Andaluza, Allegro de concierto Op. 46, La maja de Goya, así como tres Tonadillas españolas, Las majas dolorosas 1, 2, y 3, y El vito. En este punto se hizo un breve intermedio.

La segunda parte del evento no demoró, para ello, Rizo con gran habilidad y maestría se integró al público al actuar con ademanes y a viva voz complacer en obras como El mirar de la maja, El majo tímido, Amor y odio. Las notas del piano seguían firmemente en Callejeo y El tralalá y el punteado.

Breve biografía de los artistas de acuerdo a información difundida por el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA). El asistente disfrutó del talento incorporado de Silvia Rizo (soprano) y Alfredo Isaac Aguilar (piano), virtuosos que compartieron el escenario de Sala de Diálogos por segunda ocasión, como la sala sede para concertistas de esta talla en Los Mochis, ya que se habían presentado con anterioridad en el 2013 y 2014. Ambos tienen una trayectoria intachable, una vida dedicada a sus instrumentos musicales. Estudiaron música en instituciones del país, el extranjero y se prepararon para desarrollar conciertos en todo el mundo.

El concierto duró una hora y asistieron poco más de 70 personas.

Highlight. Ya entrados en la recta final los concertistas encumbraron el Concierto Maestro de música clásica española de Bellas Artes con El majo discreto y por último El Molondrón. El listado de piezas ya programado concluyó, la innovadora propuesta llegó a su fin. En todo momento el público motivó a los artistas en el escenario a murmullos de “Otra, otra” y “Una pieza más por favor”. Así los artistas, con dominio y maestría sobre sus instrumentos, pero sobre todo, la gran calidad humana de cumplir con su público, en esta ocasión mochitenes, les valió la gratificación con aplausos de pie y elogios al finalizar.

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